EL USO DE LA TECNOLOGÍA
Los que trabajamos con números, con datos, nos hemos planteado en muchas ocasiones lo lejos que estamos de otros países en cuanto al uso de las nuevas tecnologías y empezamos por preguntarnos si somos nosotros o si es el propio gobierno quien debiera dar ejemplo y exigir después que las empresas, que las personas se sumen al carro.
Son muchas las empresas a quien la tecnología puede hacerle el trabajo más fácil, sin embargo todavía a estas alturas hay arquitectos, abogados, y médicos que todavía no le sacan partido a la red, a sus conexiones, etc…
La sociedad española es muy reacia a los cambios y estos se hacen lentos habiendo sectores de la sociedad que están a la última y otros que todavía están anclados en las cavernas.
Es aún incomprensible que los datos se hagan de forma sectaria, de forma que el padrón no sirve para el DNI, Ni Hacienda con la Seguridad Social, que el chip de tu perro sirve en tu provincia pero es desconocido en la de al lado y tantos otros ejemplos.
Los datos de una persona o de una empresa que van variando con el paso de los años requiere de rellenar innumerables modelos para su actualización parcial y nos pasamos la vida dependiendo de alguna gestión.
En este sentido hay un país que entendió que centralizar todos los datos ahorraba tiempo e informaba exhaustivamente a la administración y facilitaba las gestiones a los usuarios, Estonia ponía a disposición de los ciudadanos “La tecnología”
Desde cualquier punto del país un ciudadano con un dispositivo puede acceder a la red general y cambiar sus datos, o abrir una empresa, renovar su carnet, etc… solo con un código de identificación. En los hospitales con este código acceden a todo su historial clínico, de modo que en una intervención inesperada pueden saber todos esos datos relevantes sanitarios.
Durante todo este periodo de lucha contra el virus, seguramente la intensidad de las emociones no habrá variado en un lugar con respecto de otro y también es seguro que el COVID-19 no distingue que seas de España o de Estonia para instalarse.
Pero sí que en Estonia, de una población de 1,3 millones de personas se han registrado 1.711 casos de coronavirus y solo 55 fallecidos. (Fuente Europa Press)
Otra cosa no podremos decir, pero es posible que la recogida de datos haya sido en este país mucho más exhaustiva y los afectados hayan sido más rápidamente atendidos gracias a las características del paciente registradas por norma.
La recogida de datos es muy importante y la centralización de los mismos nos llevan a un punto de no retorno, el avance tecnológico que se va imponiendo y que no lo demuestran los periodos como el que estamos atravesando. De hecho han surgido muchas empresas tecnológicas entorno a los datos: de recogida de datos mediante programas informáticos (software), de consultorías, de publicidad… profesiones de futuro.